El sendero de gran recorrido GR 90 es uno de los más importantes de Aragón, no sólo desde el punto de vista natural, sino también por su longitud, municipios que atraviesa, vistas panorámicas y miradores naturales, patrimonio monumental y cultural, etc.
Este gran recorrido atraviesa en la comarca de Tarazona y el Moncayo los siguientes municipios: Tarazona, Grisel, Lituénigo, Litago y Añón de Moncayo, en dirección a Talamantes, cruzando todo el sistema Ibérico occidental hasta Daroca.
Debido a su longitud, dividiremos el GR 90 en dos etapas, para facilitar de esta manera su recorrido.

La segunda etapa del GR 90 comienza en Litago, desde donde se abandona el sendero GR 260, y se continúa en dirección este. El camino permanece bien señalizado, y una vez que se toma la carretera en dirección a Tarazona, junto a la última casa del pueblo sale una pista a la derecha que desciende hasta el río Viejo o barranco de los Huertos. Este primer tramo coincide con el sendero PR-Z 2 que se dirige a Trasmoz, pero que a los pocos metros y una vez que cruza el río, se desvía a la izquierda. El sendero GR 90 asciende por una senda bien definida en un par de lazadas, y vuelve a enlazar con la pista anterior, que dibuja una gran curva.
El itinerario alterna un tramo de sendero con pista. El tramo de senda, bien marcado, asciende de forma suave, y cuando ya gana más altura enlaza de nuevo con una pista de tierra, muy cerca de la carretera que lleva al monasterio de Veruela. Se cruza la vía asfaltada y se continúa por una pista que discurre entre carrascas y encinas. Tras atravesar dos vaguadas la pista desemboca en un campo de cultivo de cereal. Hay que abandonar la pista unos metros antes por la derecha, remontando por una senda poco definida entre aliagas. Una vez en lo alto del relieve, continuar por la línea de cumbre, sin sendero, recto por el llano para girar poco después a la izquierda y perdiendo altura enlazar con un antiguo camino de herradura. Este último tramo en fuerte bajada.
Hay que tener especial precaución en este último tramo, ya que los sucesivos campos de cultivo y la colonización de la vegetación en los últimos años, no dejan orientarse con facilidad en todo este recorrido. El camino antiguo por el que se enlaza finalmente desciende hasta el barranco de Morca. Hay que cruzar el cauce, que permanece seco la mayor parte del año. Una vez que se cruza, se enlaza al otro lado del barranco con una pista forestal, que vuelve a ascender poco a poco hasta la localidad de Añón de Moncayo. Se trata de una bonita localidad a los pies del macizo del Moncayo, donde podemos visitar su centro de interpretación de la naturaleza y el castillo-palacio del Comendador.
El sendero se inicia desde Añón por la calle del Arco y se desciende al río Huecha. Se cruza el cauce por un puente de piedra y transcurre atravesando unas huertas hasta desembocar en una pista (sendero GR 260). Se obvia la pista de tierra, ya que el sendero cruza este carril y prosigue por una senda bien marcada, que asciende suavemente y en diagonal entre vegetación arbórea. Poco a poco la senda es más evidente, y asciende realizando una gran curva que, más adelante, cuando se endereza el camino, enlaza con una pista muy ancha.
En el cruce de pistas se toma la que se localiza justo enfrente. A partir de este momento, el itinerario transcurrirá por pista forestal hasta Talamantes. En el siguiente cruce, el camino continúa a la derecha y más adelante pasa junto a una explotación ganadera.
Una vez que se pasa la nave ganadera y el camino se adentra en el encinar, el itinerario gira en el siguiente cruce de pistas a la izquierda, cambiando a dirección sureste. A los pocos metros, otro cruce y se gira de nuevo a la izquierda en dirección noreste. A un lado nos encontramos con campos de cultivo a la derecha, y al otro el encinar, a la izquierda. Se pasa junto a una construcción a la izquierda y se enlaza con el sendero GR 260.
En el momento del enlace se gira a la derecha y a partir de este lugar se fusionan los dos itinerarios, que pasan más adelante por unas enormes explotaciones ganaderas. Solamente queda continuar por este ancho carril que más adelante permanece asfaltado y que asciende en fuerte pendiente hasta un collado, donde se enlaza también con uno de los senderos de la comarca del Campo de Borja, que procede de Ambel. Desde el collado, finalmente, el itinerario desciende hasta la localidad de Talamantes, pasando junto a los restos del castillo, y finalizando en una calle cementada que nos lleva hasta el núcleo urbano de la localidad.